single. un concierto

Nos acercamos a ver a single. Con ciertas dudas, porque el evento que los trae, el daisy market, no ofrece muchas garantías de solidez. No sólo han cambiado el cartel en el último momento, sino que la sustitución hace que sólo single sea algo realmente apetecible, y el primer grupo, por lo poco que puedo oir (y leer) en myspace no genera mucha confianza.
Como somos un par de inconscientes nos acercamos al recinto ferial con la esperanza de poder comer algo antes del concierto. Error. Sólo hay líquidos. Vale. Al centro comercial corriendo a enguillir una hamburguesa. Corre a la entrada lateral, perdida en en esa inmensidad urbana y absolutamente desangelada que son estos espacios, que necesitan unas 200 ó 300 personas para dar la impresión de que no estas solo. Llegamos con el primer concierto ya iniciado. Pero J está atento al teléfono y conseguimos encontrarnos sin problemas.
Acabamos saliendo de la sala de conferencias, reciclada a multiusos, después de presentaciones, en la segunda canción porque tanta pretenciosidad con tan poquito que ofrecer pués como que no. Así que nos tomamos un algo y fumamos (dentro de un recinto cerrado!!) antes de que empiece lo que realmente nos interesa.
Single son Teresa Iturrioz e Ibon Erranzkin. Estos dos son del tipo de gente con don. Single es la continuación natural de Le Mans. Single son una rareza. Single saben hacer grandísimas canciones. Single saben hacer buenísimos arreglos nada convencionales. Single tienen su universo personal e intransferible. A veces los amas, a veces no puedes con ellos. Además de no dejarte indiferente es difícil saber por donde van a ir.
Aunque el concierto estaba dentro de algo así como un festival, ellos aprovecharon, comentándolo muy cortésmente, para presentar su nuevo disco, Monólogo Interior. Aún así hicieron un pequeño repaso al primer disco y otras cosas. Este concierto me confirma que después de pasar por un directo tengo mejor disposición para escuchar un disco. Ya me pasó con Rufus, y ahora me ha pasado con ellos. Porque las primeras escuchas resultaron muy áridas, pero con un cd original en un buen equipo y dedicándole atención, funciona mucho mejor que a través del Spoty y poniéndolo como fondo de trabajo, qué te voy a contar... Los detalles, las letras, como siempre cuentan mucho para que una canción pase de ser algo amorfo y se convierta en un pequeña delicia. De todos modos, no nos adelantemos.
Teresa, no tiene un chorro de voz, pero sí hermosa. Supongo que lo saben, pero este par de dos no se dedican a hacer lo que uno espera de ellos. Unas bases programadas, que en algún momento pasan por encima de ella, un teclado, una guitarra (era Ibon? creo que con la edad pierdo capacidad de observación, o tal vez sea pérdida de profundidad de campo en la vista) y anti, con unos bailes entre imposibles e hipnóticos, haciendo unos coros en falsete de vértigo, y para. Pero cuando hay don hay don. Teresa sale con un vestido dorado, que en una primera impresión parece art decó pasado por un filtro naif, y un moño del que explica es algo así como una primicia. Y empieza a desplegar un encanto cautivador.
El sonido es razonablemente bueno, así que es muy disfrutable. Y la impresión es muy similar a la que tengo con sus dos discos y varios eps. Me gustan, pero me gustaría que me gustasen más de lo que me gustan, y esto ya pasaba con Le Mans, porque hay algunas cosas que me lastran. Para empezar, son de pequeñas dosis y requieren atención. No puedo abusar mucho de ellos bajo riesgo de agotamiento. Pero son capaces de desplegar un catálogo de pequeños elementos, un arreglo, unas letras, un compás, un cambio de ritmo, un sampleo, que hace que si la canción no cala por completo tampoco puedas resistirte a ella. Aunque en concierto hay una cierta pérdida en los detalles, ganan en encanto. Y se pone de manifiesto una actitud entre punk y naif, sin necesidad de hacer ruido o ser empalagoso. No puedes pensar que son pretenciosos porque la naturalidad con la que desarrollan su rareza es desbordante.
Es un vals, es un twist, es Mr. Shoji, Teresa dixit. Supongo que esta manera de presentar una de sus más celebrados hits, de los que más me gustan de ellos y camino por el cual hubiese querido que discurriese Monólogo Interior, resume su manera de ser, su capacidad de mezclar sin recurrir al tópico. Yo no se de que esquemas pueden partir para componer todo cambia en un instante, posponías, pensamiento o la cama, pero esta claro que muchas explicaciones no van a dar. O entras o no entras. No hay mucho más. Véase la explicación de Ibon en este video al respecto.
Además de las destacadas de su último disco, junto con la versión de gracias a la vida, otra versión de la matriarca de los Bosé, cayeron entre otras pío pío, honey y ese hitazo llamado tu perrito librepensador, que es imposible no bailar.
Al salir de la sala nos acercamos a comprar el cd, y haciendo un esfuerzo a que Teresa e Ibon nos lo firmaran. Ella pone la frase para el fan, e Ibon creo que ha acuñado ya la frase de: si no te parece mal voy a añadir mi firma a lo que ha escrito Teresa.
En este complicado año con tantas y tan buenas ediciones de discos este, aunque no esté en el top 10, ya tiene un hueco en el corazón.




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