miércoles, 17 de septiembre de 2003

el primer empacho

hace mucho que no actualizo el blog, pero debo decir que las circunstancias externas están marcando mi devenir últimamente. Vamos, que no soy dueño de mi propia vida. O sí? No sé. Demasiadas cosas en las que pensar para dedicarme a este tipo de reflexiones que deben ser hechas en un ambiente de calma y relajación... por que si no lo mando todo todito a tomar mucho viento.

Empecé el fin de semana de exilio en casa de mis padres, y nada más dejar la mochila en la habitación, fui bombardeado por las preocupaciones de mi madre por mis hermanos. La dejé hablar, por que casi es más necesario que ella se desahogue, pero debo reconocer que tampoco prestaba mucha atención.

Salí con G. y J. el sábado y volví a comprobar lo deshabituado que estoy al alcohol. Acabamos en un sitio que se suponen ponen buena música, pero estaban de rollito setenta r&r y psicodelia y estas cosas. Me acabé aburriendo, aunque hablé muchísimo con G. Parece que somos los mismos, pero hay que ver como las experiencias nos van modificando poco a poco. Para mejor. Para peor. Estaba exultante porque se van (por fin) a vivir juntos la semana que viene. Y yo me quedo sin unos amigos en la ciudad. Aunque parece ser que en la ciudad donde emigran hay unas tiendas de ropa estupendas con unas rebajas maravillosas. No todo van a ser cosas malas.

Lo que parecía una tranquila re entrée se ha convertido en una pesadilla. Martes entrega, jueves entrega. Y me ha cogido con el pie torcido. Ayer lo pasé mal. Pensaba que tenía callo con estas cosas, pero no. Unos cuantos errores que me han hecho perder tiempo, sufrir los colapsos de la memoria virtual del fucking windows, el agotamiento de los recursos del ordenador por parte de fucking corel. Una desesperación. Y correcorre que no llegamos. Pos cómprame un mac para hacer presentaciones estupendas, jodío! Y me paso a adobe pirata pero ya! No more corel!

Además el martes tocó madrugar mucho porque M. se marchaba dos semanas dos a las europas. Me he puesto un polo suyo que le queda un poco pequeño y a mi me sirve para mitigar ausencias.

Por fin he podido hacerme con la reedición de Indicios. Me gusta más Impermeable. Quizás le pesa un poco la producción. La voz queda un poco empastada con los arreglos. No sé, creo que técnicamente es un poco flojo. Pero la sensación que tengo es de pena. Y más después de leer el libreto. Pena de perder uno de los genios de este país.

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